Las noticias de Intel son decididamente diferentes: el proceso 14A está en juego.
Tras el anuncio de su presidente Lip-Bu Tan de recuperar la tecnología hyper-threading para sus próximos procesadores, Intel confirma hoy los riesgos que corre la empresa con sus próximos nodos de grabado. Intel ya no está completamente a la altura de Samsung y, sobre todo, de TSMC. Su próximo nodo de grabado, el Intel 18A, sólo le permitiría quedar un poco por debajo de TSMC, razón por la cual la empresa ya ha decidido reservar esta tecnología para sus propios procesadores: ahora se apunta a los clientes externos para el Intel 14A, que aún está muy lejos de estar listo.
La hoja de ruta de TSMC parece dejar muy atrás a Intel y Samsung © Tom's Hardware
De hecho, las ambiciones tecnológicas de Intel podrían calificarse incluso de nodo de última oportunidad. Como ha señalado Lip-Bu Tan, Intel ha reasignado al 14A los fondos destinados a promocionar el 18A entre sus socios. Más moderno, este nodo de grabado está en mejores condiciones para competir con TSMC y, en consecuencia, atraer a nuevos clientes. Y estos nuevos clientes son esenciales para garantizar la rentabilidad de un proceso de grabado tan fino y... caro. Intel no oculta este hecho y afirma que si no se encuentra un cliente importante para el 14A, será el fin de las ambiciones de Intel para los procesos más avanzados.
Procesos cuyos costes se han vuelto exorbitantes, mientras que las técnicas de grabado son cada vez más difíciles de dominar. No es casualidad que hace unos días fuera Samsung quien anunciara su intención de dejar de competir directamente con TSMC en los 2nm. Samsung prefiere centrarse en mejorar la rentabilidad de los nodos que actualmente utiliza la surcoreana. El problema es que, mientras Samsung ya ha aceptado el dominio de TSMC, e Intel parece que hará lo mismo a menos que se produzca un giro importante en 14A, TSMC podría encontrarse sola en los nodos de grabado más avanzados: un monopolio del que nadie debería alegrarse porque, sin competidor, TSMC podría aprovecharse de la situación para aumentar significativamente sus precios.
