Windows pronto necesitará reiniciarse con menos frecuencia para las actualizaciones, al menos en la versión Enterprise.

Escrito por Guillaume
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Este artículo es una traducción automática

Tener que esperar para apagar la máquina podría ser pronto cosa del pasado, a menos que las actualizaciones acumulativas sean menos frecuentes.

Desde que el mundo es mundo -¡bueno, no desde hace mucho! - Microsoft nos ha obligado a reiniciar nuestros ordenadores para aplicar la mayoría de las actualizaciones importantes de Windows. Con el tiempo, las cosas han ido mejorando, y ya no hay nada comparable entre Windows XP y Windows 11. Además, con el uso generalizado de las unidades SSD, los sistemas se reinician mucho más rápido, pero esto todavía puede ocurrir con demasiada frecuencia... y, gracias a la Ley de Murphy, está destinado a suceder en el peor momento posible, por ejemplo, ¡justo cuando estás recogiendo todo para salir del tren!

Como explica Clubic, a partir de la información publicada por Microsoft, la publicación de la actualización KB5058497 -lanzada hace unos días- lanza por fin lo que en la jerga se conoce como hotpatches, correcciones en caliente que no requieren reiniciar la máquina. En Windows Server, esto ya existe desde hace algún tiempo, pero por primera vez en Microsoft afecta a las máquinas cliente. Ahora es posible descargar e instalar actualizaciones mientras se sigue utilizando la máquina, sin tener que reiniciarla. El procedimiento consiste en instalar las piezas de código a través de las ranuras de RAM que aún estén libres, y el sistema se encarga de reasignar dinámicamente los recursos, sin necesidad de reiniciar.

Cada tres meses, las actualizaciones acumulativas requerirán siempre un reinicio del PC © Microsoft

Dicho esto, aún no todo es perfecto y Microsoft ya ha explicado que este tipo de parche en caliente sólo puede funcionar con parches relativamente menores. Cada tres meses, Microsoft seguirá lanzando actualizaciones acumulativas mayores, que siempre requerirán reiniciar el sistema. La otra limitación es aún más molesta: por el momento, el despliegue de hotpatches sólo afecta a los terminales que funcionan con Windows 11 24H2 Enterprise, además de las versiones Server. De hecho, es imposible aprovecharlos en Windows 11 Home y Pro, mucho más comunes en nuestro país. Podemos estar seguros de que Microsoft está trabajando en ello, y cruzaremos los dedos para que no tarde demasiado.