Nunca está de más decirlo: una contraseña no debe ser una cadena de caracteres fácilmente identificables.
Los estudios llevan años demostrando que, en general, los usuarios tienden demasiado a utilizar contraseñas "fáciles de recordar" para proteger sus cuentas de cliente, sus datos bancarios o incluso su buzón de correo electrónico. El problema es que si las contraseñas son fáciles de recordar, también son más fáciles de descifrar, y esto es aún más cierto ahora que los hackers disponen de herramientas que despliegan una importante potencia de cálculo o explotan la inteligencia artificial.
Sin embargo, un informe publicado por los analistas de Specops Software, empresa sueca especializada en soluciones de seguridad en línea, y citado por el sitio web Clubic, ofrece una pequeña sorpresa en relación con estas contraseñas. En efecto, más allá de los tradicionales "1234", "contraseña" y otros datos de nacimiento, muchos usuarios utilizan términos en los que no habríamos pensado necesariamente... pero que no son más seguros. De hecho, los nombres de varias redes sociales aparecen muchas veces en las bases de datos de contraseñas comprometidas.
Como ejemplo, los analistas observaron 114.000 apariciones de la red social LinkedIn entre los 800 millones de contraseñas comprometidas recuperadas por Specops Software. Por supuesto, la proporción es pequeña, pero la cifra no es insignificante. Como señala Clubic, LinkedIn está "en el podio de las aplicaciones encontradas en las contraseñas filtradas ". En primer lugar está el nombre de QQ, una plataforma china muy popular en su país. Le sigue Xing, una especie de LinkedIn alemán. Otras redes sociales se utilizan por supuesto como contraseñas y lógicamente incluyen Snapchat (o su forma abreviada "Snap"), Instagram (o "Insta"), Facebook, YouTube, Skype, Twitter y Weibo.
Nuestros colegas citan a Noé Mantel, especialista de producto de Specops Software: "En lugar de elegir una contraseña compleja, muchos usuarios se conforman con una palabra sencilla, a menudo de la cultura pop o algo con lo que están familiarizados. Estas malas prácticas ponen en peligro la seguridad de las organizaciones. En la misma línea, más allá de la complejidad de las contraseñas, hay que garantizar cierta variedad. Clubic señala que el 65% de los consultados admite utilizar la misma contraseña para varias cuentas. Variedad y complejidad, dos puntos a tener en cuenta a la hora de crear una contraseña.
