Nuevos procesadores que no se espera que lleguen hasta el próximo otoño.
En la inauguración de Computex 2022 en Taipei, AMD confirmó los rumores al revelar sus planes para la renovación del procesador de sobremesa. Tras las microarquitecturas Zen (2016), Zen + (2018), Zen 2 (2019) y Zen 3 (2020), es la microarquitectura Zen 4 la que ha presentado Lisa Su, CEO de AMD, durante una keynote que, lamentablemente, no ha aportado mucha información nueva para los que han seguido los rumores más recientes.
La microarquitectura Zen 4 se integrará en la nueva generación de procesadores Ryzen, la serie 7000. Será la ocasión de introducir un nuevo proceso de grabado, el TSMC 5 nm que se combinará con el TSMC 6 nm dada la naturaleza multichip de los Ryzen. De hecho, los procesadores de la serie 7000 estarán compuestos por dos CCD Zen 4 y un núcleo controlador encargado de las entradas/salidas. El primero será grabado en 5nm por TSMC mientras que el segundo se mantendrá en 6nm.
La serie Ryzen 7000 también será la ocasión para que AMD cambie la envejecida plataforma AM4 por la AM5, lo que supondrá la introducción de un nuevo socket llamado LGA o Land Grid Array. Como en el caso de Intel, esto significa que los pines ya no están en el procesador, sino en el zócalo de la placa base. El Ryzen 7000 también duplicará la cantidad de caché L2 integrada en el procesador (1 MB frente a los 512 KB de la generación anterior) y Lisa Su ha presumido de un aumento significativo de las frecuencias máximas, mencionando más de 5,5 GHz.
AMD también está aprovechando este cambio generacional para ponerse a la altura de Intel en ciertas tecnologías como la compatibilidad con la memoria RAM DDR5 o el PCI Express 5.0, mientras que prácticamente todos los procesadores de la nueva gama deberían contar con una solución gráfica RDNA 2 integrada. No hay duda de que AMD se está preparando para dar un gran golpe de efecto, aunque tendremos que esperar hasta el otoño para saberlo con seguridad.
