La próxima gran actualización de Windows 11 no se lanzará hasta el próximo otoño, pero poco a poco van apareciendo pistas sobre su contenido.
Con el nombre en clave de Sun Valley 2, se espera que la actualización 22H2 para Windows 11 incluya cambios mayores y menores. Según los hábitos de Microsoft, esta actualización debería salir en octubre, pero ya se han revelado algunos datos. Así, a través de Windows Latest, nos enteramos de que los equipos del editor están trabajando en una revisión de una de las herramientas más importantes, el gestor de tareas.
En primer lugar, destacan los cambios cosméticos. Microsoft no se ha andado con rodeos a la hora de integrar la mayoría de los elementos de diseño de WinUI 3.0. Así, es posible aprovechar los efectos Mica de Windows 11, las aportaciones de Fluent Design y, por supuesto, el soporte del inevitable modo oscuro. Las pocas capturas de pantalla disponibles también muestran que Microsoft ha optado por apoyar los llamados colores de acento del sistema. De hecho, es posible personalizar la interfaz del sistema operativo con colores particulares utilizados en el menú Inicio, la barra de tareas, las barras de título... pero también el gestor de tareas.
En un plano más "funcional", Microsoft ha decidido revisar el comportamiento de su gestor de tareas eliminando la clásica navegación por pestañas. De hecho, las pestañas "procesos", "rendimiento", "historial de aplicaciones", "inicio", "usuarios", "detalles" y "servicios" han desaparecido. Por supuesto, las funciones se mantienen: Microsoft simplemente ha decidido colocarlas en una barra lateral, que también contiene una nueva opción de "ajustes" que permite cambiar entre los modos claro y oscuro.
Por supuesto, esto es sólo una muestra del nuevo Administrador de Tareas y es muy posible que Microsoft haga más cambios significativos antes del lanzamiento de Sun Valley 2 en otoño.
